Gardel seguía siendo el cantor por excelencia, el compositor
de melodías memorables, el de promisoria carrera cinematográfica truncada en Medellín.
De Caro, por su parte, había marcado un
hito en la historia del tango con sus creaciones musicales, su orquesta y su
violín corneta.
Los homenajes eran un hecho y merecían oficializarse.
La propuesta fue bien recibida por quienes se resistían a las músicas extranjeras que atentaban contra nuestra cultura tanto como la prohibición del lunfardo y de tangos con contenido social impuesta por sucesivos gobiernos, que nos habían sumido en un abismo de no-identidad.Sin comprender la trascendencia de la solicitud, el Secretario de Cultura de la Municipalidad de Buenos Aires, Ricardo T. Freixá, solicitó a Ben Molar adhesiones a su proyecto. Las muestras de apoyo de las primeras doce entidades no tardaron en hacerse conocer: SADAIC, ARGENTORES, SADE, Casa del Teatro, Sindicato Argentino de Músicos, Unión Argentina de Artistas de Variedades, Academia Porteña del Lunfardo, Radio Rivadavia, Fundación Banco Mercantil, Asociación Gardeliana Argentina, Asociación Argentina de Actores y Asociación Amigos de la Calle Corrientes.
Pese a ello el tiempo transcurría sin respuestas, por cuanto Ben Molar amenazó cordialmente al mencionado funcionario con una movilización mediática y un festival monstruo en apoyo del “Día del Tango” en el Luna Park que gentilmente facilitaba Tito Lectoure.
El 29 de noviembre de 1977, luego de más
de una década de gestiones, se promulgó el decreto Nº 5830/77 que declaraba al 11
de diciembre como “Día del Tango” en la Ciudad de Buenos Aires.
Ese primer reconocimiento oficial contó con la actuación de destacados artistas y 15.000 espectadores que cantaron el “feliz cumpleaños” a Julio De Caro.
Esa noche se rindió homenaje a Gardel en
el mismo estadio donde se habían velado sus restos.
Ante tan contundente éxito, el Secretario de Cultura de la Nación, Dr. Raúl Alberto Casal, solicitó un espectáculo similar para despedir el año.
Ben Molar aceptó, pero a cambio pidió extender
la efeméride al nivel nacional.
El 23 de diciembre, en medio del festival
del Teatro Nacional Cervantes, se dio lectura al Decreto Nº
3781/77 firmado el 19 de diciembre, en el que quedó establecido el “Día
Nacional del Tango” para todos los 11 de diciembre.
Fuente: http://www.saij.gob.ar/ |
A partir de entonces, embajadas y consulados argentinos llevaron esta celebración a países que la adoptaron rápidamente aun sin contarla en el calendario oficial.
Pese a la adhesión mundial a esta fecha,
del otro lado del Plata se conmemora el “Día Uruguayo del Tango” cada 5 de
octubre, de acuerdo con lo establecido en la Ley Nº 18.107
del 29 de marzo de 2007.
Ben Molar pudo ver que aquel proyecto
nacido en los años ’60 alcanzaba el pináculo cuando el 30 de septiembre de 2009
el tango fue declarado “Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad” por laUNESCO.
El mismo organismo concedió ese
galardón a la voz de Gardel (2003) y al filete porteño (2015), poniendo en
valor distintas aristas de nuestra identidad, omnipresentes en el tango.
Ana Turón
[1] Moisés
Smolarchik Brenner (1915-2015) fue autor, compositor y productor musical, académico de la Academia Nacional del Tango y de la Academia
Porteña del Lunfardo,
Ciudadano Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires, miembro de la Comisión
Directiva de las Escuelas Tecnológicas ORT, miembro de la Comisión Directiva
del Instituto Cultural Argentino-Israelita, Presidente Honorario de la
Asociación Gardeliana Argentina, miembro fundador de la Casa Argentina en
Tierra Santa y miembro de la Comisión Directiva de la Asociación Amigos de la
Calle Corrientes.